El Alcoholismo
Un joven entra a su casa a las 3 AM, en estado de intemperancia (ebrio) y su madre que lo está esperando le dice:
- ¡Mira, Juan a la hora que vienes llegando!
- ¿Quién le dijo que vengo llegando?... ¡Vine a buscar mi guitarra!...
En realidad existen muchas bromas, historias y cuentos de personas que se encuentran bajo la influencia del Alcohol, como reaccionan, como hacen el ridículo, como desperdician su vida y como la terminan. Pero, lamentablemente esta situación frente a la realidad no es ningún chiste, ni tampoco es agradable para aquellos que la viven como también para sus cercanos.
Hubo un grupo musical que ridiculizó esta situación cantando //Por el vino me quede sin pega// por el vino me quede sin casa // por el vino me quede... sin nada. Y esto no es broma.
Veamos la advertencia que nuestro Dios nos hace por su palabra...
“No mires al vino cuando rojea, Cuando resplandece su olor en la copa. Se entra suavemente; Mas al fin, como serpiente morderá, Y como áspid dará dolor. Tus ojos mirarán cosas extrañas y tu corazón hablará perversidades” Proverbios 23:31-33
El alcohol es una droga capaz de producir tolerancia y dependencia. El abuso de alcohol produce dependencia física y psíquica. No es este el espacio para extenderme en la descripción de los problemas relacionados con el alcohol, simplemente los describiré para luego reflexionar en la alternativa que tiene la juventud para no caer en la trampa del maligno.
Síndrome de dependencia alcohólica.
Cirrosis hepática.
Cáncer.
Enfermedades cardiovasculares
Trastornos psíquicos y neurológicos.
Accidentes.
Suicidios.
Violencia: Malos tratos, homicidios
Síndrome alcohólico fetal y efectos del alcohol sobre el feto.
La problemática derivada del consumo de alcohol en los jóvenes es diferente a la del adulto. En los jóvenes, las consecuencias negativas derivadas del consumo de alcohol suelen referirse a alteraciones de las relaciones con la familia, compañeros y maestros, bajo rendimiento escolar, agresiones, violencias, alteraciones del orden público y conductas de alto riesgo, como conducir tras haber bebido, así como actividades sexuales no permitidas por Dios que conllevan embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.
Cuando una persona recurre al alcohol, es porque necesita algo. El alcohol es síntoma de una vida VACIA.
“Alaben la misericordia de Dios, y sus maravillas para con los hijos de los hombres. Porque sacia el alma menesterosa, y llena de bien el alma hambrienta”.
Salmos 107:8-9
Muchos jóvenes se cobijan en el alcohol para afirmar su identidad, para sentirse adultos, como forma de independencia, para olvidar las penas, por angustia, por temor e inseguridad, para escapar de la realidad, para relajarse, para socializar o para suplir alguna carencia, también muchos por soledad. Si estas personas tuvieran a Jesús en su vida comprenderían que todos esos problemas pueden ser resueltos por Jesucristo si reconocemos nuestros pecados y pedimos perdón a Dios por ellos, reconocemos que necesitamos ayuda de lo alto para resolver nuestras dificultades, y no la ayuda del Alcohol.
Muchos consideran que el vino no es malo, pero la Biblia nos alerta que es un peligro para el cristiano que quiere agradar a Dios. “Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida”. Isaías 5:22.
Podemos comprender la obra satánica en medio de nuestra juventud, incentivándole al consumo de alcohol mostrándoles bellos paisajes, hermosos jóvenes y señoritas que disfrutan de gratos momentos gracias a alguna bebida alcohólica, pero la verdadera invitación es solo para esclavizarlo.
Tenemos que estar alertas y no permitir que el engaño del Enemigo de todos nosotros, nos confunda. Beber alcohol es abrirle la puerta a ese enemigo, y caer en una trampa cuyo fin es la muerte.
Ante esta realidad, solo podemos meditar que si las cadenas del alcoholismo te han atrapado, solo Cristo te puede liberar, para ello es necesario reconocer nuestra debilidad, confesarlo ante el Padre, quien en su amor y por Jesús con su sangre derramada nos dará libertad.
“El que encubre sus pecados no prosperará, más el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia”. Proverbios 28:13
Pero tú que nunca has sucumbido en esta trampa de pecado, debes recordar que solo es misericordia del Señor y te exhorto a no apartarte de esa misericordia.
Con amor fraterno te regalo este hermoso Salmo...
1:1/3 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará
Un joven entra a su casa a las 3 AM, en estado de intemperancia (ebrio) y su madre que lo está esperando le dice:
- ¡Mira, Juan a la hora que vienes llegando!
- ¿Quién le dijo que vengo llegando?... ¡Vine a buscar mi guitarra!...
En realidad existen muchas bromas, historias y cuentos de personas que se encuentran bajo la influencia del Alcohol, como reaccionan, como hacen el ridículo, como desperdician su vida y como la terminan. Pero, lamentablemente esta situación frente a la realidad no es ningún chiste, ni tampoco es agradable para aquellos que la viven como también para sus cercanos.
Hubo un grupo musical que ridiculizó esta situación cantando //Por el vino me quede sin pega// por el vino me quede sin casa // por el vino me quede... sin nada. Y esto no es broma.
Veamos la advertencia que nuestro Dios nos hace por su palabra...
“No mires al vino cuando rojea, Cuando resplandece su olor en la copa. Se entra suavemente; Mas al fin, como serpiente morderá, Y como áspid dará dolor. Tus ojos mirarán cosas extrañas y tu corazón hablará perversidades” Proverbios 23:31-33
El alcohol es una droga capaz de producir tolerancia y dependencia. El abuso de alcohol produce dependencia física y psíquica. No es este el espacio para extenderme en la descripción de los problemas relacionados con el alcohol, simplemente los describiré para luego reflexionar en la alternativa que tiene la juventud para no caer en la trampa del maligno.
Síndrome de dependencia alcohólica.
Cirrosis hepática.
Cáncer.
Enfermedades cardiovasculares
Trastornos psíquicos y neurológicos.
Accidentes.
Suicidios.
Violencia: Malos tratos, homicidios
Síndrome alcohólico fetal y efectos del alcohol sobre el feto.
La problemática derivada del consumo de alcohol en los jóvenes es diferente a la del adulto. En los jóvenes, las consecuencias negativas derivadas del consumo de alcohol suelen referirse a alteraciones de las relaciones con la familia, compañeros y maestros, bajo rendimiento escolar, agresiones, violencias, alteraciones del orden público y conductas de alto riesgo, como conducir tras haber bebido, así como actividades sexuales no permitidas por Dios que conllevan embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.
Cuando una persona recurre al alcohol, es porque necesita algo. El alcohol es síntoma de una vida VACIA.
“Alaben la misericordia de Dios, y sus maravillas para con los hijos de los hombres. Porque sacia el alma menesterosa, y llena de bien el alma hambrienta”.
Salmos 107:8-9
Muchos jóvenes se cobijan en el alcohol para afirmar su identidad, para sentirse adultos, como forma de independencia, para olvidar las penas, por angustia, por temor e inseguridad, para escapar de la realidad, para relajarse, para socializar o para suplir alguna carencia, también muchos por soledad. Si estas personas tuvieran a Jesús en su vida comprenderían que todos esos problemas pueden ser resueltos por Jesucristo si reconocemos nuestros pecados y pedimos perdón a Dios por ellos, reconocemos que necesitamos ayuda de lo alto para resolver nuestras dificultades, y no la ayuda del Alcohol.
Muchos consideran que el vino no es malo, pero la Biblia nos alerta que es un peligro para el cristiano que quiere agradar a Dios. “Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida”. Isaías 5:22.
Podemos comprender la obra satánica en medio de nuestra juventud, incentivándole al consumo de alcohol mostrándoles bellos paisajes, hermosos jóvenes y señoritas que disfrutan de gratos momentos gracias a alguna bebida alcohólica, pero la verdadera invitación es solo para esclavizarlo.
Tenemos que estar alertas y no permitir que el engaño del Enemigo de todos nosotros, nos confunda. Beber alcohol es abrirle la puerta a ese enemigo, y caer en una trampa cuyo fin es la muerte.
Ante esta realidad, solo podemos meditar que si las cadenas del alcoholismo te han atrapado, solo Cristo te puede liberar, para ello es necesario reconocer nuestra debilidad, confesarlo ante el Padre, quien en su amor y por Jesús con su sangre derramada nos dará libertad.
“El que encubre sus pecados no prosperará, más el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia”. Proverbios 28:13
Pero tú que nunca has sucumbido en esta trampa de pecado, debes recordar que solo es misericordia del Señor y te exhorto a no apartarte de esa misericordia.
Con amor fraterno te regalo este hermoso Salmo...
1:1/3 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará
No hay comentarios:
Publicar un comentario